Un adolescente de 16 años quedó imputado por "tentativa de homicidio" después de provocarle gravísimas heridas a un compañero, que terminó sufriendo pérdida de la audición.

El hecho ocurrió en la escuela N° 728 de Puerto Madryn. Los adolescentes habían protagonizado una discusión durante el recreo y todo se calmó cuando volvieron al aula, pero uno de los alumnos pidió permiso para ir al baño, volvió con un fierro en la mano y enseguida comenzó a pegarle en la cabeza a su compañeros aprovechando que estaba de espaldas.

Los testigos aseguran que la víctima cayó al suelo después del tercer golpe y afortunadamente otro de los estudiantes intervino para sujetar al agresor y tirar el caño por la ventana. Todo ocurrió en pleno horario escolar y adelante de la profesora que estaba dando clase.

La víctima terminó con 13 puntos en la cabeza y se está recuperando con algunas secuelas, como la pérdida de audición. "No le pegó en ningún lugar más que en la cabeza y si no intervenía el otro compañero lo iba a seguir golpeando en la cabeza en el piso", indicó la madre del joven agredido.

La causa fue caratulada como "intento de homicidio" y el agresor, de 16 años, ya se encuentra formalmente imputado. Algunos compañeros aseguraron que no es la primera vez que hostigaba y tenía actitudes violentas hacia la víctima.