La tarea es llevada adelante por personal especializado y consta de cavar pozos de 50 centímetros de profundidad en donde se plantan los árboles con una distancia de 7 metros entre sí. 

Una vez colocados, el mismo personal municipal procede a la complementación con la compactación de la tierra, colocación de tutores, cintas de nylon y protector para hormigas.

Las especies plantadas serán monitoreadas por personal técnico del Departamento Espacios Verdes a la vez que se le practicarán los primeros riegos de rigor y colocación de productos domisanitarios (de uso doméstico) para combatir plaga de hormigas. 

La iniciativa del Gobierno municipal se coordinó luego de reuniones mantenidas por representantes de la Secretaría de Servicios y Espacios Públicos y el área Vecinales con autoridades de la Vecinal del barrio Monseñor Zaspe.